(Carnavalito)
Desde que te conocí
te hiciste dueño de mí,
yo no te ofrezco grandezas
Viday,
sólo el amor que te di.
El amor con el amor,
el desdén con el desdén,
y la ingratitud se paga
Viday,
con ingratitud también.
Que consuelo puedo darte
al tiempo de mi partida.
Te dejó mi corazón,
te dejo toda mi vida,
y hasta otro día.
Tambien te dejo una palma
con un letrero que dice:
Adiós vidita del alma
y hasta otro día...
Tenha acesso a benefícios exclusivos no App e no Site
Chega de anúncios
Badges exclusivas
Mais recursos no app do Afinador
Atendimento Prioritário
Aumente seu limite de lista
Ajude a produzir mais conteúdo